Aunque el principal aprovechamiento que en España se hace del eucalipto es el de la producción de celulosa, no es éste el único aprovechamiento que genera el eucalipto. Los aprovechamientos de cada especie forestal dependen de las características tecnológicas de la madera, que en el caso del eucalipto blanco (Eucalyptus
globulus), son las siguientes.
En madera estructura, la calidad ME-2 de la norma UNE 56.544, en la procedencia española, se corresponde con la clase resistente D35
Secado:
Difícil. Riesgos de deformación, fendas y colapso de la madera.
Durabilidad natural e impregnabilidad:
No durable frente a la acción de los hongos y las termitas
Propiedades tecnológicas
El aserrado es difícil debido a las tensiones de crecimiento. Requiere el empleo de equipos de gran potencia. Es apta para el desenrollo, aunque la calidad de las chapas no es muy buena. Mecanizado sin problemas. Mal comportamiento en clavado y atornillado.
Los principales aprovechamientos del eucalipto, son los siguientes:
Celulosa
De las especies españolas, el Eucalyptus globulus es la más adecuada para la fabricación de celulosa, tanto por tamaño y calidad de la fibra, como por su color más claro. Los rendimientos medios de la especie oscilan entre los 6 m3/Ha·año del sur peninsular, a los 15 m3/Ha·año del norte. Se trata de la especie más rentable en Europa para este tipo de aprovechamiento, superando a los abedules y otras frondosas.
En cuanto al Eucalyptus camaldulensis, comparada con la de la especie anterior, su madera es de fibra más corta, de color más rojizo y el rendimiento del aprovechamiento es mucho menor, por lo que cada vez se emplea menos para la producción de celulosa.
Madera
Muchas especies de eucalipto suministran maderas de construcción, apeas, postes y traviesas. En total, estos aprovechamientos rondan el 15% de la producción total. Su dureza, especialmente en el caso del Eucalyptus
camaldulensis, así como su buen pulimento, la hacen una madera muy útil para fabricación de suelos de parquet, alcanzando elevados precios. Es destacable también su aprovechamiento como madera para la producción de leñas. La del Eucalyptus
globulus supera en densidad a la de "la encina". También se emplea la madera del eucalipto para la fabricación de tableros de partículas.
Otros usos
El kino puede obtenerse por destilación, como producto pardo-oscuro, opaco, astringente y amargo. Las especies más ricas en kino son las del grupo "ironbark".
El follaje de muchas especies se destila para la obtención de aceites (especialmente los eucaliptos del grupo "peppermint"), que se aplican en medicina (extracción de la rutina, substancia de gran importancia terapéutica), perfumería y varias industrias.
Hay especies melíferas (especialmente de los grupos "ironbark" y "boxes").
Considerando el árbol como tal, y no los productos que de él se obtienen, hay muchas especies que se plantan con finalidad ornamental, en pies aislados, en grupos, alineaciones, o masas. Algunas especies se emplean con finalidades protectoras: fijación de dunas, estabilización de zonas erosionadas, desecación de zonas pantanosas, formación de cortavientos, etc… También se emplean como elementos proveedores de sombra y abrigo del ganado en zonas pastorales de muchos países áridos o semiáridos. En los desiertos australianos, algunos eucaliptos con tubérculos leñosos constituyen una importante fuente de agua para los aborígenes. Asimismo, determinados eucaliptos presentan semillas comestibles o excrecencias azucaradas producidas por ciertas cochinillas. El koala (Phascolarctos
cinereus) se alimenta exclusivamente de las hojas de determinadas especies de eucalipto.
Actualmente, la investigación sobre el eucalipto se centra en los siguientes aspectos:
Investigación Genética
Su objetivo es mejorar genéticamente los árboles empleados en las plantaciones, a través de injertos de árboles seleccionados. En esta línea, el Grupo ENCE ha constituido una Población Principal de Mejora de Eucalyptus globulus mediante cruces controlados de semillas de sus clones comerciales para, a partir de ahí, clonar y seleccionar los nuevos individuos que superen a los clones que constituyen su actual Población de Propagación.
Investigación Selvícola
Su labor consiste en la realización de ensayos para la preparación del suelo, fertilización, y realización de labores selvícolas. El CIT de ENCE, dentro de esta línea de investigación, ha desarrollado diversos métodos propios de gestión de las masas, así como un programa de lucha biológica contra la Phoracantha semipunctata, principal plaga del eucalipto, a través de la cría de su parasitoide específico Avetianella longoi.
Investigación Celulósica
La fábrica de celulosa de Huelva realiza estudios y análisis sobre la posibilidad de producir pasta TCF teniendo en cuenta los distintos factores que inciden en el proceso, esto es: agua, maderas, etc… con el objetivo de producir pasta de alta blancura con características técnicas elevadas. A tal fin se ha diseñado un prototipo de digestor piloto que pretende reproducir cualquier tipo de modificación en la cocción.
Aspectos selvícolas
El principal objetivo de las plantaciones de eucaliptos es la producción por lo que todas las actuaciones que se llevan a cabo se orientan a la consecución de tal fin. Como explotación forestal, sus beneficios ecológicos y ambientales son, por tanto, inferiores en determinados casos a los que se dan en formaciones naturales. Ahora bien, la posibilidad de emplear sus productos para satisfacer las necesidades de materia prima forestal tiene un efecto indirecto en la protección natural al contribuir a disminuir la presión sobre formaciones naturales en otros países del mundo.
La implantación de un eucaliptar requiere, como labor previa, la eliminación de la vegetación preexistente. Los métodos dependerán de las condiciones ecológicas y fisiográficas de la zona.
Asimismo, es muy recomendable la preparación previa del suelo mediante un laboreo que, en suelos duros, favorece, principalmente, el crecimiento de la plantación, mientras que en suelos sueltos incide, sobre todo, en la reducción del número de marras.
Se suele utilizar planta de, al menos, una savia de edad, que no llegue a pasar de los 45 cm en su parte aérea.
La época de plantación recomendable es el otoño, para permitir a la planta una buena resistencia al frío invernal y estar perfectamente enraizada cuando lleguen los rigores estivales. La plantación ha de hacerse con suelo húmedo. De esta forma en el sur de España se comienza a plantar tras las primeras lluvias fuertes de otoño y se planta hasta primavera. En el norte se planta en primavera e, incluso, en verano.
Si el producto perseguido no requiere especiales valores de calidad y dimensión (celulosa, partículas, etc...) se prefieren plantaciones densas, con turnos cortos, en las que el rendimiento es mayor. Si lo que se pretende es obtener madera de determinadas dimensiones se empleará un marco de plantación que puede variar de 4 x 4 metros en el sur a 3 x 3, e incluso 2 x 2 metros en el norte.
Durante los primeros momentos de crecimiento de la plantación (uno o dos años) es necesario suministrar determinados cuidados destinados a reducir la competencia de otras especies, por lo que se realizan binas, a veces combinadas con gradeos cuando la plantación no ha llegado al segundo año, en el que dicha práctica puede dañar las raíces. En el norte se realizan siegas para eliminar los helechos. Una vez pasan los tres primeros años, el eucalipto consigue controlar la vegetación circundante aunque en lugares húmedos es frecuente la necesidad de seguir realizando tareas de limpieza.
La edad de corta del eucalipto depende de factores tales como la especie, la calidad de la estación y el marco de plantación. También influye el precio de las diferentes dimensiones de la madera. Tras la corta se produce un rebrote de cepa en forma de monte bajo, que se caracteriza por tener:
un rápido crecimiento inicial
un elevado número de brotes
una mayor extracción de nutrientes por la planta
De todos esos rebrotes se seleccionará, en función de su vigor, un número igual a la densidad inicial de plantación. Estos rebrotes se suelen cortar a edad algo menor que la primera vez volviendo a comenzar el proceso que culmina con un total de tres o cuatro recepes en el sur y, hasta cinco o seis en el Norte. Tras el último recepe, con la caída de vigor de la cepa, se procede al destoconado y, en su caso, replantación.