Identificación de micromamíferos

La clave que presentamos a continuación busca, siempre que sea posible, criterios fáciles de observar y claramente diagnósticos. A medida que avanzamos en el árbol taxonómico, los pasos son más complejos. Es decir, siempre nos va a resultar más sencillo distinguir, por ejemplo, los erizos de las musarañas que las distintas especies de musarañas entre sí. Todos los criterios indicados en los textos de la clave vienen acompañados de una fotografía macro en la que, mediante flechas, letras o color, intentamos marcar exactamente dónde se halla el criterio que debe ser observado y comparado para avanzar por la clave o finalmente determinar la especie. La página se carga a resolución baja, para ver las imágenes a resolución completa hay que pinchar sobre ellas. La mayoría de los ejemplares pertenecen a nuestras colecciones particulares y son procedentes del análisis de egagrópilas. Para unos pocos, hemos recurrido a fotografiar ejemplares de la colección de vertebrados de la Estación Biológica de Doñana; estos últimos vienen detallados en el título de la imagen. 

Hemos incluido criterios diagnósticos a partir de diferentes partes del cráneo. Ello es útil porque, por ejemplo, los restos óseos procedentes de egagrópilas suelen aparecer fragmentados y separados entre sí. En muchos casos es posible la identificación de la especie sólo con una pieza del cráneo, para otras, en cambio, esto resulta imposible. Por lo tanto, no es necesario en la mayor parte de los casos, aunque sí conveniente, disponer de todas las partes del cráneo del ejemplar para determinar la especie.

En la clave se encuentran criterios diagnósticos fáciles de interpretar: “tienen 5 dientes o tienen 7”; frente a otros que son criterios comparativos: “ligeramente más inclinado”, que para su correcta interpretación se requiere una cierta experiencia. Con estos últimos, hemos hecho un esfuerzo gráfico mayor.

Por último, hemos reducido en lo posible el uso de la biometría y sólo la indicamos en los casos en los que resulta claramente diagnóstica. Es decir, si indicamos que una medida es mayor que un determinado valor, es porque no conocemos ningún ejemplar de esa especie con un valor inferior.

A medida que se adquiera experiencia en la determinación de las distintas especies no va a resultar necesario recorrer en cada caso todos los pasos de la clave. Por ello, ponemos a continuación los accesos directos a los distintos niveles que hemos establecidos, a partir de los cuales se puede continuar el proceso de identificación. 

• Ficha 1: Cómo diferenciar insectívoros de roedores.
• Ficha 2: Cómo diferenciar los principales grupos de insectívoros: erizos, topo y musarañas/musgaños.
  • Ficha 3: Cómo diferenciar entre las dos especies de erizos.
  • Ficha 4: Cómo diferenciar el musgaño de Cabrera, el musgaño enano y las musarañas de dientes blancos.
  • Ficha 5: Cómo diferenciar entre las dos especies de musarañas de dientes blancos del género Crocidura.
• Ficha 6: Cómo diferenciar entre los principales grupos de roedores: ardilla/lirón careto, ratones/ratas y topillos/rata de agua.
  • Ficha 7: Cómo diferenciar la ardilla del lirón careto.
  • Ficha 8: Cómo diferenciar ratas de ratones.
  • Ficha 9: Cómo diferenciar entre las dos especies de ratas del género Rattus.
  • Ficha 10: Cómo diferenciar el ratón de campo (Apodemus sylvaticus) de los ratones del género Mus.
  • Ficha 11: Cómo diferenciar entre las dos especies de ratones del género Mus.
  • Ficha 12: Cómo diferenciar las distintas especies de topillos y rata de agua.