La Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Inmaterial (17 de octubre de 2003) de la Unesco define el patrimonio inmaterial como:

“los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas -junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural. Este patrimonio cultural inmaterial, que se transmite de generación en generación, es recreado constantemente por las comunidades y grupos en función de su entorno, su interacción con la naturaleza y su historia, infundiéndoles un sentimiento de identidad y continuidad y contribuyendo así a promover el respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana”.

Será en el año dos mil seis cuando España ratifica la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial aprobada por la Unesco en el dos mil tres. Será a partir de esta fecha cuando se inician por parte de las comunidades autónomas y del estado español las propuestas de inclusión de bienes inmateriales en las Listas (Representativa, Buenas prácticas y Medias Urgentes) recogidas en la citada convención.

Entre los documentos generados en el marco del estado español tras la ratificación de la Convención de 2003, se encuentran el Plan Nacional de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial (2011), o la Ley 10/ 2015 para la salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial. También debemos señalar las conclusiones generadas en el marco de las Jornadas sobre Protección del Patrimonio Inmaterial (Teruel, 2009).

Desde el punto de vista normativo también es necesario tener en cuenta la ley 16/ 1985 del Patrimonio Histórico Español que en el Titulo VI se refería a los “Conocimientos y Actividades” como bienes integrantes del patrimonio etnográfico.

Sobre las aportaciones de estos documentos podemos mencionar por ejemplo el texto del citado Plan Nacional (2011), que señala como objetivo principal la salvaguarda del Patrimonio cultural Inmaterial, entendiendo que esta son “las medidas encaminadas a garantizar la viabilidad del Patrimonio Cultural Inmaterial, comprendidas las acciones de identificación, documentación, investigación, preservación, protección, promoción, valorización, transmisión y revitalización”. Junto a este objetivo principal se plantean otros como:

• Establecer unas bases teóricas consensuadas acerca del concepto, características y ámbitos del PCI, los sistemas de registro, etc.
• Elaborar proyectos relativos a la identificación, documentación, difusión y promoción de las manifestaciones culturales inmateriales
• Sensibilizar a la sociedad y lograr el reconocimiento institucional en el marco de las políticas culturales
• Facilitar la información y la coordinación entre las administraciones

El Plan Nacional define el patrimonio cultural inmaterial de la misma manera que lo hiciera la Convención y señala que este se manifiesta en los siguientes ámbitos:

1. Conocimientos tradicionales sobre actividades productivas, procesos y técnicas.
2. Creencias, rituales festivos y otras prácticas ceremoniales
3. Tradición oral y particularidades lingüisticas
4. Representaciones, escenificaciones, juegos y deportes tradicionales
5. Manifestaciones musicales y sonoras
6. Formas de alimentación
7. Formas de sociabilidad colectiva y organizaciones

Bebiendo en parte de este Plan Nacional y de otros documentos, la Ley 10/2015 viene a certificar la ratificación de la Convención de Unesco de 2003 y el compromiso con esta y otras normas internacionales, a la vez que establece como una competencia estatal, la salvaguarda del patrimonio cultural inmaterial. Dentro de las funciones atribuidas a este respecto se encuentran:

1. La propuesta, elaboración, seguimiento y revisión del Plan Nacional de Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial
2. La gestión del Inventario General de Patrimonio Cultural Inmaterial
3. La salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial mediante la Declaración de Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, en los términos previstos en esta ley