e-Motion. Revista de Educación, Motricidad e Investigación
2020, nº 15, pp. 47-63. ISSNe: 2341-1473
http://dx.doi.org/10.33776/remo.v0i15.5068
Contacto María Mendoza Muñoz mamendozam@unex.es
Relación existente entre la ratio 2D:4D y la composición corporal en
adolescentes de Extremadura
Relationship between 2D:4D ratio and body composition in adolescents
in Extremadura
Maria Mendoza Muñoz1, Juan Manuel Franco García1, David Gallego-Tena1, Jorge
Carlos Vivas1.
1 Health, Economy, Motricity and Education (HEME) Research Group, Facultad de Ciencias del
Deporte, Cáceres, España.
Resumen
Introducción: La ratio 2D:4D es el cociente entre la longitud del dedo índice
y anular de la mano, asociada al balance entre andrógenos y estrógenos,
durante el desarrollo embrionario. Una baja proporción 2D:4D, refleja niveles
más altos de testosterona en el útero. Esta medida se ha relacionado con
ciertos parámetros de la composición corporal, que podrían ser indicativos
de la probabilidad de presentar riesgos para la salud. Objetivos: analizar si
existe relación entre la ratio 2D:4D y la composición corporal y explorar las
diferencias entre los sexos. Método: Se realizó un estudio observacional y
correlacional con 225 adolescentes (108 chicos y 117 chicas), de entre los 12
y 17 años. Se realizaron medidas antropométricas, de composición corporal
y la ratio 2D:4D. Resultados: se encontró una relación directa entre la ratio
2D:4D porcentaje de masa grasa (r=,321 y p<,001) y con el IMC (r=,241 y
p<,001). Al segmentar por sexo esta correlación solo se encontró en chicas
(r=,408, p<,001 y r=,419, p<,001, respectivamente). Además, se encontraros
diferencias significativas entre sexos para altura (p=,002), porcentaje de grasa
(p<,001) y masa muscular (p<,001), ratio 2D:4D (p<,001). Conclusiones: existe
una relación directa de la ratio 2D:4D con el porcentaje de masa grasa y el
IMC en adolescentes de Extremadura; es decir, mayores ratios 2D:4D se
asocian a mayores porcentajes de grasa e IMC. Además, las chicas presentan
mayores ratios 2D:4D y porcentaje de masa grasa, y menor altura y masa
muscular en comparación con los chicos.
Abstract
Introduction: The ratio 2D:4D is the quotient between the length of the index and ring finger of the hand,
associated to the balance between androgens and estrogens, during the embryonic development. A low
2D:4D ratio reflects higher levels of testosterone in the uterus. This measure has been associated to certain
body composition parameters, which could be indicative of the likelihood of health risks. Objectives: to
analyze if there is a relationship between the 2D:4D ratio and body composition and to explore the
differences between the sexes. Methods: An observational and correlational study was carried out with 225
adolescents (108 boys and 117 girls), between the ages of 12 and 17. Anthropometric, body composition
and 2D:4D ratio measurements were made. Results: A direct relationship was found between the ratio
2D:4D fat mass percentage (r=.321 and p<.001) and with the BMI (r=.241 and p<.001). When segmented
by sex, this correlation was only found in girls (r=.408, p<.001 and r=.419, p<.001, respectively). In addition,
significant differences were found between sexes for height (p=.002), fat mass percentage (p<.001) and
muscle mass (p<.001), ratio 2D:4D (p<.001). Conclusions: there is a direct relationship between the ratio
2D:4D and the fat mass percentage and BMI in adolescents from Extremadura; that is, higher ratios 2D:4D
are associated with higher fat mass percentages and BMI. In addition, girls have higher 2D:4D ratios and
fat mass percentage, and lower height and muscle mass compared to boys.
Fecha de recepción:
13-12-2020
Fecha de aceptación:
31-12-2020
Palabras clave
Adolescencia; estado de
salud; IMC; jóvenes; masa
grasa; ratio digital
Keywords
Adolescence; BMI; digit
ratio; fat mass; health
status; youth.
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Introducción
En la actualidad existen diversas medidas antropométricas que han servido para determinar
diferentes características relacionadas con aspectos sociales, psicosociales, evolutivos o de
salud. Algunas de estas medidas son: el dimorfismo facial, tomando algunos puntos faciales
como referencia (Carré & McCormick, 2008; Muñoz-Reyes, Gil-Burmann, & Turiegano, 2014),
la dermatoglifia, que consiste en el estudio de indicadores dactilares conseguidos mediante
impresiones digitales de las manos (Avella & Medellín, 2013; Juárez-Toledo, Domínguez-
García, Laguna-Camacho, Sotomayor-Serrano, & Balbás-Lara, 2018; Rodriguez, Montenegro,
& Petro, 2019) o la ratio 2D:4D, que viene determinada por el cociente entre las longitudes
de los dedos índice (2D) y anular (4D). No obstante, es importante indicar que no es
aconsejable utilizar estos métodos de forma aislada y sí en relación con otros.
Más específicamente, la relación 2D:4D viene dada por el balance entre los andrógenos y los
estrógenos durante un pequeño espacio temporal del desarrollo embrionario (Zheng & Cohn,
2011). Estudios previos informaron que los andrógenos del útero de la madre podrían
estimular el crecimiento 4D, mientras que los estrógenos podrían estar relacionados con el
crecimiento del 2D (Manning et al., 2000; Swaddle, 2002). Así, niveles altos de testosterona en
el útero, en comparación con los niveles de estrógenos, se relacionan con una ratio 2D:4D
baja; por lo que los hombres suelen presentar, ratios 2D:4D más bajos que las mujeres (Fink,
Thanzami, Seydel, & Manning, 2006; Hönekopp & Schuster, 2010; Kociuba, Kozieł,
Chakraborty, & Ignasiak, 2017; Manning et al., 2000). Este dimorfismo sexual, comienza a partir
de la novena semana de vida fetal (Malas, Dogan, Evcil, & Desdicioglu, 2006), y se ve poco
afectado por la pubertad, es decir, que la ratio 2D:4D no se ve influenciado por el crecimiento
del individuo, siendo relativamente estable a lo largo de la vida (McIntyre, Ellison, Lieberman,
Demerath, & Towne, 2005; Trivers, Manning, & Jacobson, 2006). Por tanto, la ratio 2D:4D no
difiere entre las diferentes etapas de desarrollo del individuo.
La ratio 2D:4D se constituye como una medida pida, fácil, permanente, no invasiva, y de
bajo coste de la exposición androgénica prenatal (Bermúdez, 2018). Estudios previos han
mostrado que esta ratio, puede estar relacionada con ciertos parámetros de la composición
corporal, que podrían ser indicativos de la probabilidad de presentar riesgos para la salud
que pudieran estar asociado a una mala composición corporal (sobrepeso u obesidad,
enfermedad coronaria, hipertensión arterial o diabetes mellitus) (Carvalho et al., 2015;
González, Díaz, Mendizabal-Ruiz, Medina, & Morales, 2014; Peltzer et al., 2014) y con ellos
actuar de manera preventiva ante ellos. Por tanto, la ratio 2D:4D podría ser utilizada como
herramienta complementaria para conocer la probabilidad de riesgos para la salud
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relacionados con una mala composición corporal, aportando así, mayor cantidad de datos y
reforzando de esta manera las decisiones a tomar en relación con la detección diferentes
patologías.
La ratio 2D:4D ha sido también estudiada en relación con diferentes aspectos como: el nivel
de agresividad, trastornos psicosociales, y diferentes aspectos de la salud o la educación
(Coates, Gurnell, & Rustichini, 2009; Coco et al., 2011; Grimbos, Dawood, Burriss, Zucker, &
Puts, 2010; Romero-Martínez et al., 2013). En este sentido, Bailey y Hurd asociaron una ratio
más baja con rangos más altos de puntuaciones en agresividad física en los hombres (Bailey
& Hurd, 2005); sin embargo, no encontraron relación en mujeres. Esto podría explicarse por
la presencia de mayores niveles de testosterona en hombres, ya que, niveles más elevados de
testosterona han sido asociados con mayores niveles de agresividad (Simpson, 2001). En este
contexto, en relación con la ratio 2D:4D, como ya se ha indicado previamente que, menores
ratios 2D:4D se asocian con niveles de testosterona más elevados (van der Meij, Almela,
Buunk, Dubbs, & Salvador, 2012).
La ratio 2D:4D ha sido también relacionada con diferentes trastornos imperantes en niños y
adolescentes. Por ejemplo, Romero-Martínez et al. (Romero-Martínez et al., 2013),
relacionaron la ratio 2D:4D con el Trastorno del Espectro Autista (TEA), mostrando que la ratio
2D:4D de los progenitores de personas con TEA, podría explicar los cocientes de empatía y
autismo, conductas cooperativas y niveles de cortisol. En esta misma línea, Font-Jordá et al.
(Font-Jordà, Gamundí, Llobera, & Aguilar-Mediavilla, 2018) mostraron la relación inversa entre
la ratio 2D:4D de la mano y el Trastorno Específico del Lenguaje en niños de entre 5 y 8 años.
Así mismo, estudios previos mostraron la relación directa existente entre la ratio 2D:4D y los
niveles séricos de estradiol en adolescentes de entre 8 y 15 años (Zhang et al., 2019) indicando
que, una mayor ratio 2D:4D se asoció con mayores niveles séricos de estradiol y la relación
inversa entre la ratio 2D:4D y la severidad prequirúrgica del cáncer de próstata, mostrando
que menores ratios, se relacionaron con una mayor severidad (Sánchez-Rodríguez et al.,
2018).
Por tanto, las observaciones expuestas anteriormente sugieren que las longitudes de los
dígitos pueden servir como medida práctica indirecta del comportamiento y del estado de
salud o enfermedad (Mayhew, Gillam, McDonald, & Ebling, 2007).
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Dentro del ámbito de la salud, más específicamente, la ratio 2D:4D ha sido relacionada con
la composición corporal. Estudios previos, mostraron que las personas con mayores ratios
2D:4D, presentaban un mayor porcentaje de grasa corporal (Agha-Alinejad, Farzad, Akbari,
Moffit, & Dakhili, 2019; Eler, 2018). También se ha analizado la relación entre la ratio 2D:4D y
diferentes parámetros antropométricos como la altura, el peso, el índice de masa corporal
(IMC), la circunferencia de la cintura (Eler, 2018; Erkec, 2019; Ranson, Stratton, & Taylor, 2015)
y la relación cintura-pecho (Fink, Neave, & Manning, 2003). En líneas generales, la mayoría de
autores informan de la existencia de una relación directa entre la ratio y el IMC, pero inversa
entre la ratio y la altura. No obstante, otros estudios no encontraron ningún tipo de relación
entre la ratio 2D:4D y algunas medidas antropométricas, como por ejemplo, el índice de masa
corporal y la cintura en adultos (Muller et al., 2013). Estas contradicciones podrían derivarse
del número de participantes sobre los que se realizaron los diferentes estudios.
En base a lo expuesto anteriormente, la ratio 2D:4D podría constituirse como medida útil, de
obtención fácil, rápida y de bajo coste, estable y no invasiva, que podría servir como
complemento a otras medidas, dando una visión inicial orientativa acerca de las relaciones
mencionadas con anterioridad. En este sentido, podría ser interesante conocer si existe alguna
relación entre la ratio 2D:4D y diferentes parámetros relacionados con la composición
corporal en adolescentes; así como analizar si existen diferencias entre sexos, tanto en la ratio,
como en la composición corporal. Teniendo en cuenta todo lo anterior, se plantearon las
siguientes hipótesis: 1) menores ratios 2D:4D se relacionarán con menores niveles masa grasa
e IMC y mayores niveles de masa muscular y 2) los chicos presentarán menores ratios 2D:4D,
menor porcentaje de masa grasa y mayor cantidad de masa muscular en comparación con
las chicas.
Por tanto, el presente estudio tuvo los siguientes objetivos: 1) explorar si existe alguna relación
entre la ratio 2D:4D con el IMC, la masa muscular y el porcentaje de masa grasa en
adolescentes de Extremadura y 2) analizar si existen diferencias entre sexos para estos
parámetros.
Método
Diseño del estudio
Se realizó un estudio observacional y correlacional para obtener información sobre la
composición corporal y la ratio 2D:4D en adolescentes de secundaria de Extremadura,
encuadrado dentro del Observatorio de Bienestar, Obesidad y Motricidad Infantil y Juvenil en
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Extremadura (WOMO) (Mendoza-Muñoz et al., 2020b). La información recopilada se procesó
para analizar las posibles relaciones y asociaciones entre las diferentes variables evaluadas y
explorar si existen diferencias entre sexos para los diferentes parámetros evaluados.
Aprobación ética
La aprobación ética fue proporcionada por el Comité de Bioética y Bioseguridad de la
Universidad de Extremadura el 18 de diciembre de 2019 (número de aprobación: 257/2019).
Calculo muestral
Se requiere un tamaño muestral de 70 para alcanzar una potencia estadística del 90% para
detectar una diferencia de -0,310 entre la correlación de hipótesis nula de 0,290 y la
correlación de hipótesis alternativa de 0,60 utilizando una prueba de hipótesis de dos caras
con un nivel de significación igual a 0,05.
Participantes
Para reclutar la muestra del presente estudio, se contactó con dos centros de Educación
Secundaria de Extremadura, uno de la provincia de Cáceres y otro de la provincia de Badajoz.
Se reclutaron un total de 225 adolescentes (108 chicos y 117 chicas), con edades comprendidas
entre los 12 y los 17 años.
Los participantes debían cumplir los siguientes criterios de inclusión: 1) edad comprendida
entre 12 y 17 años, 2) estar empadronados y/o residir en la comunidad autónoma de
Extremadura, 3) estar autorizados por sus padres o tutores legales y 4) aceptar su
participación voluntaria en el estudio.
Procedimiento, material y medida.
En este proyecto se utilizaron diversas herramientas para evaluar tanto la la ratio 2D:4D como
la composición corporal de los participantes.
Ratio 2D:4D. La ratio 2D:4D se tomó utilizando un calibrador Vernier digital (Mitutoyo Co,
Kanagawa, Japón) con una precisión de 0,01 mm. Se tomó como referencia la superficie
ventral de la mano, y dentro de ella, la línea media del pliegue basal del dedo elegido,
extendiéndose los dos extremos del calibrador por ella hasta llegar a la punta del mismo y sin
ejercer presión en ella; tal y como describieron Manning, Scutt, Wilson, and Lewis-Jones
(1998).
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Figura 1. Medición 2D:4D
Nota. Tomado de Why is digit ratio correlated to sports performance? (p.515), por Kim & Kim, 2016, Journal of
exercise rehabilitation.
Medidas antropométricas y composición corporal. Se realizaron en condiciones
estandarizadas, siguiendo en todo momento el protocolo establecido en el Manual de
Procedimiento de Recopilación de Datos, elaborado específicamente para la iniciativa
Childhood Obesity Surveillance Initiative (COSI) (Wijnhoven et al., 2014). Antes de tomar
cualquiera de las medidas, se pidió a los participantes que se quitaran los zapatos y calcetines,
así como cualquier ropa pesada (abrigos, suéteres, chaquetas, etc.) que portaran. Además, se
les pidió que vaciaran sus bolsillos y se quitaran los cinturones y otros accesorios o
complementos que pudiesen llevar. La altura se midió con un tallímetro (Tanita Tantois, Tanita
Corporation, Tokyo, Japón). El tallímetro se colocó en una superficie vertical de manera que
la escala de medida estaba perpendicular al suelo. La talla se medió en bipedestación, con los
hombros equilibrados y los brazos relajados a lo largo del cuerpo. La medida se tomó en cm,
hasta el mm más cercano. El peso se midió con un bioimpedanciómetro (Tanita MC-780 MA,
Tanita Corporation, Tokyo, Japón) y se registró en kilogramos, hasta los 100 g más próximos.
Este mismo instrumento se utilizó para evaluar la masa grasa y la masa muscular. La
evaluación se realizó en el "modo estándar", introduciendo la edad, el sexo y la altura de cada
participante. Se siguieron todas las recomendaciones para asegurar la validez y fiabilidad de
los datos tomados por el bioimpedanciómetro (Sgroi & De Lorenzo, 2011; TANITA, 2015):
realizar la prueba más de 3 horas después de levantarse, orinar antes de la medida, no comer
ni beber durante las 3 horas previas a la prueba, no comer ni beber en exceso el día anterior,
no hacer ejercicio pesado ni beber alcohol durante las últimas 12 horas y no portar objetos
metálicos o poseer marcapasos. Este instrumento ha sido previamente validado en la
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población objetivo comparando sus resultados con la densitometría (CCI: 0,84) (Verney,
Schwartz, Amiche, Pereira, & Thivel, 2015).
Análisis estadístico
Toda la información recopilada se tabuló en una base de datos anonimizada y diseñada
específicamente para este estudio. Los análisis estadísticos se llevaron a cabo utilizando el
software IBM SPSS Statistics (Version 21, IBM SPSS, Chicago, IL, USA).
Los datos se presentan como media y desviación típica; así como, mediana y rango
intercuartílico, tanto para la muestra total como para las submuestras divididas por género
(chicos y chicas). En primer lugar, se comprobó la normalidad y homogeneidad de los datos
usando las pruebas de Kolmogorov-Smirnov y Levene, respectivamente. Posteriormente, las
diferencias entre sexos se analizaron utilizando la prueba T de Student para muestras
independientes en el caso de las variables paramétricas (variables de distribución normal):
altura y porcentaje de grasa; y la prueba U Mann-Whitney para las variables no paramétricas
(variables de distribución no normal): edad, peso, IMC, masa muscular y ratio 2D:4D. Se
consideraron diferencias significativas para p ≤ 0,05.
Adicionalmente, para cuantificar las relaciones entre las diferentes variables, se aplicaron los
coeficientes de correlación de Pearson (variables paramétricas) y Spearman (variables no
paramétricas). Se aplicó la corrección de Bonferroni a partir la fórmula α*= α/n-1 (McLaughlin
& Sainani, 2014), donde α* es el valor corregido con el cual se debe rechazar la hipótesis nula
y n es la cantidad de pares de hipótesis. Por tanto, el nivel de significación alfa se fijó en 0,025
para las comparaciones múltiples de la ratio 2D:4D con la composición corporal. Los valores
de correlación se interpretaron siguiendo los umbrales de clasificación de Cohen (Cohen,
1988): < 0,2 muy baja o casi nula; 0,2 a < 0,4 baja; 0,4 < 0,6 moderada; 0,6 a < 0,8 alta; ≥ 0,8
muy alta o casi perfecta.
Resultados
El número total de participantes fue de 225, siendo similar el número de chicos y chicas
participantes en el estudio (48% chicos versus 52% chicas).
La Tabla 1 muestra la caracterización de los participantes y la comparación entre ambos sexos
para la edad, las variables antropométricas y de composición corporal y la ratio 2D:4D. Los
resultados mostraron diferencias estadísticamente significativas a favor de los chicos en la
altura (p=,002), el porcentaje de masa grasa (p<,001) y masa muscular (p<,001). Además, se
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encontraron diferencias estadísticamente significativas en la ratio 2D:4D de la mano derecha,
siendo esta menor en los chicos (p<,001).
Tabla 1. Caracterización y diferencias significativas entre sexos en las variables de composición
corporal y dimensiones de los dedos.
Chicos
Chicas
p
108 (48)
117 (52)
Media (DT)
13,59 (1,32)
13,72 (1,51)
,758
Mediana (RI)
13,00 (1,00)
13,00 (1,00)
Media (DT)
54,14 (14,06)
51,44 (9,37)
,130
Mediana (RI)
52,9 (20,9)
49,80 (11,10)
Media (DT)
161,80 (10,71)
158,03 (7,03)
,002
Mediana (RI)
163,50 (15,75)
158,00 (8,00)
Media (DT)
20,32 (3,68)
20,52 (3,04)
,367
Mediana (RI)
19,80 (5,40)
20,40 (3,85)
Media (DT)
19,99 (6,00)
27,00 (5,08)
<,001
Mediana (RI)
18,35 (9,55)
26,10 (6,55)
Media (DT)
40,67 (9,34)
35,31 (4,97)
<,001
Mediana (RI)
40,15 (15,40)
34,70 (6,75)
Media (DT)
0,94 (0,05)
0,96 (0,42)
<,001
Mediana (RI)
0,92 (0,06)
0,95 (0,06)
Mediana (RI)
7,05 (0,44)
6,79 (0,54)
2D:4D: ratio 2D:4D de la mano derecha; 2D: medida del dedo índice; 4D: medida del dedo anular. N: tamaño de
muestral. Los datos se muestran como media (Desviación Típica) y Mediana (Rango Intercuartílico). Se consideraron
diferencias significativas cuando p ≤ 0,05.
La Tabla 2 muestra la relación existente entre la ratio 2D:4D de la mano derecha con las
variables de composición corporal. En general, los resultados mostraron una correlación
directa de la ratio 2D:4D con el IMC y el porcentaje de masa grasa, lo que significa que una
menor ratio 2D:4D se asocia con menores valores de IMC y porcentaje de grasa.
Resultados similares se encontraron tanto para el IMC como para el porcentaje de masa grasa
en las chicas, al segmentar los datos por sexo. En cambio, no se encontraron correlaciones
significativas entre ninguna variable antropométrica ni de composición corporal con la ratio
2D:4D.
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Tabla 2. Relación entre la ratio 2D:4D y la composición corporal.
IMC
Masa Muscular
Masa Grasa (%)
Todos
2D:4D
,241**
-,011
,321**
Chicos
2D:4D
,186
,133
,145
Chicas
2D:4D
,419**
,036
,408**
2D:4D: ratio 2D:4D mano derecha. *Correlación significativa a nivel ,025;
**Correlación significativa a nivel ,01
Discusión
Los principales hallazgos del presente estudio muestran que los chicos presentan una mayor
altura y masa muscular; mientras que las chicas muestran un porcentaje de grasa y una ratio
2D:4D mayor, al comparar ambos sexos. Además, se encontró una relación directa entre la
ratio 2D:4D con el IMC y el porcentaje de masa grasa al considerar ambos sexos. No obstante,
al segmentar por sexo, solo se mantuvo dicha relación en las chicas. En cambio, no se
encontrón diferencias entre sexos ni para el peso, ni para el IMC; así como, tampoco se obtuvo
relación entre la ratio 2D:4D y la masa muscular.
Los resultados de este estudio concuerdan con los reportados por estudios previos que
mostraron diferencias significativas entre sexos en diferentes parámetros de composición
corporal en población adolescente (Castro-Piñero et al., 2009; Kirchengast, 2010; Mendoza-
Muñoz et al., 2020a; Ortega et al., 2011) y que no encontraron diferencias en el IMC (Mendoza-
Muñoz et al., 2020a; Ortega et al., 2011). De igual forma, en relación a las diferencias
significativas encontradas en la ratio 2D:4D entre chicos y chicas (p<.001), diversos estudios
abalan esta teoría en numerosas poblaciones (Butovskaya, Fedenok, Burkova, & Manning,
2013; Fink, Manning, & Neave, 2006; Hampson, Ellis, & Tenk, 2008; Hönekopp & Schuster,
2010; Kociuba et al., 2017; Manning et al., 2000; Putz, Gaulin, Sporter, & McBurney, 2004;
Ranson et al., 2015), como por ejemplo, en escolares (Ranson et al., 2015), adolescentes
(Butovskaya et al., 2013), o adultos (Hampson et al., 2008; Putz et al., 2004). Esto puede ser
explicado por la corriente que afirma que la ratio 2D:4D no se ve afectada por el crecimiento
(McIntyre et al., 2005; Trivers et al., 2006). Concretamente, autores como Manning et al. (2000)
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o Swaddle (2002) indicaron que el crecimiento prenatal del cuarto dedo estaría estimulado
por los andrógenos; mientras que, el segundo dedo lo estaría por los estrógenos. Esto podría
explicar que los chicos presenten una ratio significativamente menor que chicas y, ya que, una
baja proporción en la ratio 2D:4D, refleja niveles más altos de testosterona en el útero, en
comparación con los niveles de estrógenos (Malas et al., 2006).
La ratio 2D:4D ha sido mostrada como un biomarcador relacionado con las medidas
antropométricas (Erkec, 2019; Fink et al., 2003). En este sentido, los resultados del presente
estudio muestran que existe una asociación entre la ratio 2D:4D tanto con el porcentaje de
masa grasa (r=,321, p<,001), como con el IMC (r=,241, p<,001). No obstante, dicha relación
difiere ligeramente al segmentar por sexos, ya que, la relación de la ratio 2D:4D con el
porcentaje de masa grasa e IMC se mantiene las chicas (r=,408, p<,001 y r=,419, p<,001,
respectivamente), pero no existe en los chicos (r=,145, p=,135 y r=,186, p=,054
respectivamente). Estos resultados coinciden con los reportados en estudios realizados
previamente como los de Ranson et al. (2015), Agha-Alinejad et al. (2019) y Eler (2018).
Concretamente, Agha-Alinejad et al. (2019) concluyeron que existía una relación directa entre
la ratio 2D:4D y el porcentaje de masa grasa (r=,132; p<,05) en niñas con una edad
ligeramente inferior (8-12 años). Respecto a la relación entre la ratio y el IMC, estudios previos
mostraron también una relación directa (Eler, 2018; Ranson et al., 2015), sumado al de otras
variables como la estatura y la circunferencia de cintura, no existiendo relación en el caso de
los niños (Ranson et al., 2015), en línea con los resultados del presente estudio. Esta relación
directa entre la ratio 2D:4D y la masa grasa puede ser debida a que los estrógenos estimulan
la multiplicación de las células grasas (Mauras et al., 2015), lo que apoyaría los resultados
obtenidos, donde un mayor ratio 2D:4D se relaciona con una mayor porcentaje de grasa.
Adicionalmente, estudios previos observaron una relación negativa entre la ratio 2D:4D y la
masa muscular (Halil et al., 2013; Kociuba et al., 2018; Pruszkowska-Przybylska et al., 2018), que
no fue obtenida en el presente estudio; a pesar de que, la testosterona ha sido relacionada
positivamente con la producción de tejido muscular (Lin et al., 2012), y por tanto, una menor
ratio implicaría una mayor cantidad de tejido muscular.
En este sentido, las relaciones establecidas entre la ratio y los parámetros de composición
corporal, sugieren que la ratio 2D:4D podría ser utilizada como herramienta complementaria
para la obtención de información inicial sobre la predisposición a presentar una mayor o
menor porcentaje de masa grasa y/o IMC, desde el nacimiento; ya que como se mencionaba
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anteriormente dicha ratio es estable a lo largo de la vida (McIntyre et al., 2005; Trivers et al.,
2006). Esto permitiría actuar de manera preventiva ante los diferentes riesgos para la salud o
patologías asociados a la presencia de mayor cantidad de grasa o un alto IMC, como pueden
ser sobrepeso u obesidad, enfermedad coronaria, hipertensión arterial o diabetes mellitus
(Carvalho et al., 2015; González et al., 2014; Peltzer et al., 2014). No obstante, los resultados
obtenidos deben tomarse con cautela, ya que la ratio 2D:4D podría aportar una visión inicial
en relación con dicha predisposición, la cual debería ser confirmada con herramienta
específicas para la valoración de la composición corporal.
Es necesario indicar que el presente estudio cuenta con una serie de limitaciones. Aunque el
calibrador Vernier es un instrumento fiable (CCI mano derecha:0,77), Allaway, Bloski, Pierson,
and Lujan (2009) propone otras técnicas con las que se podría mejorar la calidad del estudio,
por ejemplo, mediante la utilización del escáner Hewlett Packard ScanJet 3C (CCI mano
derecha:0,79), el uso de la fotocopiadora Xerox Copycenter C35 (CCI mano derecha:0,87) o
el Programa de manipulación y edición de imágenes GNU; GIMP versión 2.217 (CCI mano
derecha:0,91). Por tanto, podría ser interesante realizar estudios futuros para analizar las
diferencias entre las diferentes técnicas de medición propuestas. Otra de las limitaciones,
podría ser el uso del bioimpedanciómetro para la evaluación de la composición corporal, en
lugar de densitometría ósea, considerado el “gold estándar”. No obstante, el
bioimpedanciómetro utilizado (Tanita MC-780 MA, Tanita Corporation, Tokyo, Japón) ha
demostrado un gran acuerdo y concordancia en la población objetivo (CCI > 0,99) (Verney
et al., 2016). Finalmente, cabe mencionar que basamos nuestros hallazgos en una muestra
representativa de los participantes en Extremadura, pero un tamaño muestral mayor podría
mejorar la fuerza de las asociaciones y clarificar los resultados.
Conclusión
Con base a los resultados del presente estudio se puede concluir que existe una relación
directa de la ratio 2D:4D con el porcentaje de masa grasa y el IMC en adolescentes de
Extremadura; concretamente, que mayores ratios 2D:4D se asocian a mayores porcentajes de
grasa e IMC. Sin embargo, al segmentar por sexo, dicha correlación solo se cumple en las
chicas. Además, podemos afirmar que las chicas presentan mayores ratios 2D:4D y porcentaje
de masa grasa, y menor altura y masa muscular en comparación con los chicos.
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Agradecimientos
Los autores desean agradecer a las escuelas y profesionales que permitieron el acceso para
llevar a cabo este estudio.
Conflicto de interés
Los autores declaran no tener conflicto de interés.
Financiación
Esta investigación está financiada por el Servicio Público de Empleo de Extremadura (SEXPE),
número de subvención TE-0009-18. Los financiadores no desempeñaron ningún papel en el
diseño del estudio, la decisión de publicar o la preparación del manuscrito.
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