La importancia del ecosistema emprendedor para la economía...
113RIESISE, 3 (2020) pp. 105-125
http://dx.doi.org/10.33776/riesise.v3i1.3678
“privación de habilidades básicas que conducen a la vulnerabilidad, la
exclusión, la falta de poder, la participación y la voz, la exposición al miedo
y a la violencia; finalmente, a la exclusión de los derechos básicos y del
bienestar” (p.1). Por eso, la búsqueda de alternativas para reducirlos pasa
por “dos vías simultáneas”: la formulación de nuevos modelos de desarrollo
y la definición e implementación de políticas públicas que permitan una
distribución más equitativa de los bienes y recursos sociales.
En este sentido, se cree que el papel de la ESS como un instrumento
efectivo de contribución a este debate gana espacio y relevancia, dado que
la ESS se presenta como un paradigma alternativo de producción y consumo,
capaz de generar trabajo e ingresos, además de impactar aspecto de cuño
social, político, territorial, cultural y ambiental (Morais y Ferreira, 2018).
4. LA CONTRIBUCIÓN DE LA ESS EN LA NUEVA ERA TECNOLÓGICA
La ESS comprende una variedad de prácticas económicas y sociales,
que realizan actividades de producción de bienes, prestación de servicios,
finanzas solidarias, trueques, comercio justo y consumo solidario. Este
fenómeno multifacético que, progresivamente, gana espacio en la
academia, en las agendas de políticas públicas nacionales e internacionales
y por la adhesión de sus actores, se presenta, en los últimos años, como
una alternativa innovadora para la generación de empleo e ingresos y una
respuesta a favor de la inserción sociolaboral. Adicionalmente, también
puede considerarse como un nuevo modelo de desarrollo más humano e
inclusivo (Morais, Dash y Bacic, 2017).
Independientemente de la heterogeneidad en términos de definiciones
y organizaciones de ESS (cooperativas, sociedades mutuales, asociaciones,
organizaciones comunitarias, empresas sociales, fundaciones, universidades
con sus incubadoras de emprendimientos, empresas recuperadas, ONGs,
etc.), lo importante es prestar atención a los elementos comunes que nos
permiten identificar organizaciones que se encajan como ESS. En general,
funcionan a partir de principios operativos específicos basados en: valor
social, participación voluntaria, solidaridad, reciprocidad, innovación,
propiedad colectiva, autogestión, empoderamiento, cohesión social,
gobernabilidad democrática y comunitaria y articulación armoniosa
con el territorio. Algunos de esos actores, tal como las cooperativas
(agrarias, de producción, de consumo, etc.), las mutualidades, los bancos
comunitarios y las empresas recuperadas actúan dentro del mercado,
vendiendo o permitiendo acceso a productos o servicios para clientes o
socios. Estos actores constituyen los emprendimientos de la economía
social y solidaria (EES).
En esta dirección, se debe reconocer la existencia de una relación proficua
entre la ESS y un alternativo paradigma de producción y de consumo, más