El deudor descuartizado (Doble tablas, tab. iii, 6). Un análisis
E, , () . - https://doi.org/10.33776/erebea.v12i2.7781
dían acabar nalmente descuartizadas o despedazadas, según nos cuentan, en los
frecuentes accesos de violencia callejera que jalonaron la historia de la Ciudad30.
Siguiendo al lósofo italiano del E. Forcellini, se llegó a interpretar partis
como partes viriles, precisando incluso unus ex testiculis de modo que se trataba de
especie de derecho de castración, a partir de una dudosa interpretación de un tex-
to del jurista Gayo31. Otros análisis identican el objeto a repartir con los bienes
del deudor, en un sentido amplio, incluyendo sus funciones y capacidades, según
recogía E. H. Warmington, de J. Taylor, H. Nettleship. J. v. Jhering y M. Voigt.
Se trataría de la división de su patrimonio según la costumbre32. En otro lugar se
habla de la división del precio obtenido por la venta trans Tiberim, de anunciar las
partis al magistrado, tomando el verbo sequor o secor, o de un descuartizamiento y
reparto del cadáver con sentido místico, como cumplimiento del mandato de los
dioses, acomodando el tamaño de las partes al de las deudas33.
Hace un siglo el francés Emile Jobbé-Duval pensaba que partis secanto iba re-
ferido al caso en que el deudor muriera poca causas naturales, por lo que los acree-
dores se repartían el cadáver, impidienso su sepultura, de modo que sus parientes
se vieran obligados a pagar un rescate para recuperar todo el cuerpo y procurar al
difunto reposo en el más allá. Una tesis interesanten pero demasiado articiosa
y compleja, que planteaba serias cuestiones, como qué pasaba si no fallecía, o si
tardaba en hacerlo o lo hacía por causas no naturales, o quién le alimentaba o le
acogía en el interim34.
30 Cic. rep. IV. 10-12, A. Magdelain, Le ius (1986), pp. 274 y 327. M. Radin, (1922), p.
39. Para Livio, I. 28.1-11 el despedazamiento del albano Metio Fufetio, por su traición a Tulo
Hostilio, atado a dos carros en dirección contraria, única vez que se usó este método de ejecución,
Gell. XX.1.54; Verg. Aen. VIII. 643. Acabaron despedazados o descuartizados por sus enemigos el
tribuno Publio Furio, en tiempos de Cayo Graco, Ap. BC I. 33; el pretor Sempronio Aselión, en
los ochenta, V. Max. IX. 7.3; Marco Mario, ejecutado por Catilina, Sen. ira, III. 18. 1-2; el cónsul
del 67 C. Calpurnio Pisón, DC XXXVI. 39. 3; el eques Lucio Vetio, en los sesenta, Suet. Caes. 17;
el tribuno C. Helvio Cina, tras la muerte de César, Ap. BC II. 147; V. Max. IX. 9. 1; Suet. Caes.
85; DC XLIV. 50. 4; Plut. Bruto, XX.11; Runo, prefecto pretorio a nes del siglo IV d. C., Claud.
contr. Runo II, 405/420, y Cleandro, liberto imperial, mutilado y arrojado a las cloacas, Herod.
I. 13. 6. 415 d. C. La neoplátonica astrónoma y matemática Hypatia fue arrastrada en Alejandría,
año 415 d. C., por una multitud de cristianos que la despedazó, según Sócrates Escolástico, Historia
eclesiástica, VII. 15, J. Mª Blázquez Martinez, (2008), p. 469.
31 Gayo, inst. III. 121; IV. 22; OLD, admite el signicado de secare como castrar, entry 3 c, p.
1717; B. Collinder, (1967-1968), 5-20; E. Forcellini, (1965), p. 579.
32 M. Radin, (1922), p. 34; E. H. Warmington, (1938), p. 440; M. Voigt, (1883), pp. 693-
737. H. M. Dunn, (1969), 102; R. v. Jhering, (1994), p. 273.
33 J. Muirhead, (1886), en E. H. Warmington, (1938), p.440; F. Schulin, (1889), - secere -, en
E. H. Warmington, (1938), p. 440; H. Lévy-Bruhl, (1934), p. 57; H. Lévy-Bruhl, (1935), p. 57; A.
Magdelain, (1990), p. 656; Se descuartiza el cadáver del deudor, A. Piganiol (1934), pp.152-167.
34 E. Jobbé-Duval, (2000), p. 144; P. Pérez Alvarez, (2011), p. 25.