
El control de estabilidad (ESP del alemán Elektronisches Stabilitätsprogramm) mejora el EDS en el sentido que éste sólo evita que se produzcan pérdidas de motricidad por exceso de aceleración, y no es capaz de recuperar la trayectoria del vehículo en caso de excesivo subviraje o sobreviraje, lo cual sí consigue el ESP. Este sistema fue desarrollado originalmente por Mercedes-Benz y Bosch, y hoy en día lo desarrollan y comercializan otros fabricantes con nombres como Vehicle Dynamic Control (VDC), Dynamic Stability Control (DSC), Electronic Stability Control (ESC) y Vehicle Stability Control (VSC).