Estudiantes de la asignatura “Derecho Penal e Intervención Social, de Tercero de Grado de Trabajo Social, impartida por la Profª. Soledad Arroyo, han podido compartir una mesa redonda sobre el funcionamiento de la Unidad Terapéutica y Educativa (UTE) del centro penitenciario de Huelva. Técnicos e internos del centro han compartido experiencias y conocimientos a través del trabajador social Daniel Sánchez-Lecaroz, la educadora Luisa Hernández, la psicóloga Eva Martínez y los internos de apoyo Jonathan Flores y Eduardo Cuellar, representando a los internos de los dos módulos UTE con que cuenta la Prisión de Huelva.
Durante las casi tres horas en que se desarrolló la actividad, se incidió especialmente en la necesidad de hacer de la reinserción social una realidad, para la que resulta imprescindible el tratamiento penitenciario. El ingreso en la UTE debe ser voluntario por parte del interno en régimen ordinario o segundo grado, que asume el compromiso por escrito, al firmar el contrato terapéutico, de renunciar al consumo de drogas y cumplir las normas. En la unidad reciben también la formación académica básica y participan en actividades formativas y ocupacionales.
Las UTE son modelos de cogestión, suponen una gran implicación por parte de los internos, que cuando llegan a ser internos de apoyo adquieren gran responsabilidad y se ocupan de su propio grupo terapéutico.
Los estudiantes se mostraron especialmente interesados en las experiencias personales de los internos de apoyo que participaron en la mesa, en el cambio radical que había supuesto en sus vidas la decisión de ingresar en la UTE, especialmente porque al no consumir y poder de ese modo centrarse en su recuperación, habían logrado retomar-mejorar sus relaciones familiares y sociales. Precisamente sobre esta cuestión se detuvo finalmente Daniel Sánchez-Lecaroz, que supo transmitir a los asistentes las posibilidades que ofrece el ámbito penitenciario para el desarrollo profesional del trabajador social.
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