Huelva 18 junio 2021. El doctor en Literatura Comparada por la Universidad de Huelva Salvador Campos Jara ha sacado a la luz la historia del personaje onubense conocido como Gonzalo Guerrero, uno de los miembros de la expedición española que acudía a la conquista de América y que terminó quedándose e integrándose con los indios de Yucatán.
Su interés por el personaje se debe, en primera instancia, a la “conjunción de dos casualidades”, explica el propio Campos Jara, a quien en primer lugar le llamó la atención de la historia de Cabeza de Vaca que vio en una película con ese mismo título en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva en el año 1992 y, después, la historia similar de Gonzalo Guerrero, que conoció a través de Bernal Díaz del Castillo.
Al ser “un personaje que era de Huelva y con una historia muy similar a la de Cabeza de Vaca”, que tanto le impresionó, Salvador Campos Jara comenzó a investigar sobre el primero y lo hizo en México, donde estuvo dos años, tras lo que realizó su trabajo de doctorado sobre él.
Se trata de un “personaje muy curioso”, pues, “cuando empiezas a estudiarlo, todo conduce a un misterio”, desgrana este doctor de la Universidad de Huelva. “No hay un registro claro de su persona. Nada nos indica claramente cuál es su origen, aunque los textos más antiguos hablan de que era de Palos de la Frontera o del Condado de Niebla. Y ni siquiera dan un nombre claro. Se refieran a él como Gonzalo Arosa, Fulano Morales, Gonzalo Marinero o Gonzalo Herrero. Y no es hasta 1953 cuando Francisco López Góngora, en su Historia de la Conquista de México, lo bautiza con el nombre con que lo conocemos hoy, que es el de Gonzalo Guerrero, pero realmente los textos más antiguos que conocemos abocan a un misterio”, relata el investigador de la Onubense.
Lo que sí tiene claro Salvador Campos Jara es que “es un personaje que se hace llamativo por lo atípico, porque acabó quedándose con los indios, lo que era bastante inusual, de manera que cuando Hernán Cortés, rumbo a la conquista del imperio Azteca en 1519, para en la isla de Cozumel y recoge a un náufrago, se entera que llevaba siete años entre los indios mayas de Yucatán”, explica.
“Le cuenta la historia de un personaje que se quedaba allí, que se negaba a unirse a la expedición española argumentando que estaba casado con una india con la que tenía hijos, que tenía el cuerpo tatuado y lacerado ceremonialmente y que tenía miedo de que, si los españoles lo veían, lo terminaran acusando de hereje, por lo que se quedó entre los indios”, prosigue el doctor de la Universidad de Huelva.
Campo Jara explica que Gonzalo Guerrero fue acusado posteriormente de haber “organizado la resistencia de los mayas a la conquista española, básicamente porque fue de las más difíciles y más ruinosas de todas las que hubo en el nuevo mundo”. Y es que “contrastaba mucho con la del Imperio Azteca por parte de Hernán Cortés, que fue rapidísima, o con la de Perú, pues la de Yucatán se prolongó a lo largo de varias décadas y se culpó a Gonzalo Guerrero de ser la supuesta persona que estaba detrás de la resistencia de los mayas”, explica.