La actriz sevillana, Ana Fernández (ganadora de un Goya), llevará a cabo este jueves el intenso monólogo ‘El lunar de Lady Chatterley’ en el Auditorio de la Universidad de Huelva. Una obra dirigida por Antonio Gil, escrita por Roberto Santiago, e inspirada en la novela ‘El amante de Lady Chatterley’, de D.H. Lawrence; en la que la famosa actriz se introducirá en la piel de Constance Chatterley, una mujer adúltera en la Inglaterra de principios del siglo XX, que deberá defenderse ante un tribunal compuesto exclusivamente por hombres. 

Ana Fernández, con una amplia trayectoria cinematográfica (‘Solas’, ‘Hable con ella’ o ‘La novia’) y televisiva (‘La Mari’ o ‘Policías: en el corazón de la calle’), visitará Huelva para dar voz a este icono literario y feminista en el nuevo espacio escénico de la Universidad. 

¿Cuál es tu relación con Huelva?

 Ahora vivo en Madrid, pero siempre que vuelvo a Sevilla, si tengo tiempo, tengo que bajar al mar, a Huelva o a Cádiz. Huelva ha sido para mí un referente desde pequeña, era donde íbamos cuando necesitábamos respirar el mar y sentir las olas. Además, su gastronomía me ha gustado mucho siempre, se come muy bien; el jamón, las coquinas y las gambas… Pero no solo es eso, también es la luz, y la gente. Me hacen sentirme muy a gusto. 

‘El lunar de Chatterley’ es un monólogo que se sostiene con un único personaje, espacio y tiempo escénico, ¿ha resultado un reto para ti? 

Pues sí. Sales a escena muy solita y la única forma de estar segura es agarrándote al personaje. Estás con ella y con el público, durante una hora u hora y cuarto, basándote únicamente en la palabra. 

He leído críticas que dicen que funciona muy bien de ritmo.

Sí, porque el personaje de Constance es muy inteligente; es una mujer muy rápida, muy irónica, muy valiente… realmente es más inteligente y más rápida de pensamiento que yo, por lo que ha sido un enorme reto meterme dentro de ella.  

¿Consideras que el alegato de la obra tiene un discurso necesario, que continúa vigente a día de hoy?

Sí, porque no deja de tratar sobre un ser humano que lucha por su libertad, así que cualquiera va a poder sentirse identificado con ella. La obra original se escribió en 1928, estuvo prohibida durante 30 años en Inglaterra y luego se vendió como una novela erótica, debido a sus escenas explícitas. Pero no se prohibió por eso, se prohibió porque el personaje de Constance amenazaba con romper los modelos establecidos en la época. Y esos modelos no han cambiado tanto, nada más hay que ver cuántas mujeres mueren al año. En este país mueren más mujeres a manos de sus parejas o ex parejas que personas a causa del terrorismo, y eso es muy grave y muy triste. 

¿Qué valores feministas de la obra piensas que todavía no se han logrado del todo? ¿En qué piensas que hemos avanzado y en qué piensas que estamos igual?

Se ha avanzado bastante, afortunadamente, porque las mujeres votamos, tenemos independencia, podemos expresarnos (entre comillas) más libremente, pero si ahondas un poquito, lo de luchar por la libertad de una misma sigue levantando un poco de ampollas. 

Has comentado en otras ocasiones que sueles interpretar a “mujeres más fuertes” que tú. En esta ocasión, has dicho también que crees que Constante es más inteligente, ¿a qué crees que se debe?

A que son auténticas heroínas de lo cotidiano. Mis personajes son personas normales que, en situaciones extraordinarias, se convierten en heroínas. Algo de mí habrá en ellas, pero yo vivo en unas circunstancias muchísimo más amables, no sé lo que me pasaría a mí en circunstancias extraordinarias, no lo sé.  

¿Te sientes más a gusto en el cine, en televisión o en el teatro?

Cada uno tiene su característica especial, distinta. A mí las cosas que me interesan, y por las que me decido a hacer un proyecto o no, son la historia y el personaje que me ofrecen. Interpretar es meterte cada día en el alma del personaje y sentir el privilegio de que vives otras vidas. 

La Universidad tiene un Auditorio nuevo, y la tuya es una de las primeras obras teatrales que se van a representar allí. ¿Qué te parece que la universidad pública invierta en las artes escénicas, tanto en infraestructuras, como en programar obras todos los años?

Un regalo y una necesidad, sobre todo en los tiempos que corren. Que haya un espacio nuevo, además, dentro de un lugar dedicado a la educación y a la formación, cuando en otras partes se están cerrando teatros, es una muy buena noticia. Ojalá todas las Universidades tuvieran estas iniciativas.  

‘El lunar de Chatterley’ tendrá lugar este jueves en el nuevo Auditorio de la Universidad de Huelva, donde además, el miércoles, el Grupo de Teatro y Danza de la Universidad de Granada, llevará a cabo su obra ‘Lorca en la suite de los espejos’.

La semana que viene, el teatro continuará estando presente en la programación de esta Primavera Cultural de la UHU, con la adaptación de Shakespeare ‘Sueño-noche-verano’, llevada a cabo por el Aula de Teatro de la Universidad de Huelva, y con la comedia escrita por William Missouri Downs (guionista de El príncipe de Bel-Air y Luz de Luna) ‘Fuera de órbita’, de la Jaula Teatro.